Abr, 2024.- Este 10 de abril de 2024 retumban en la región más oriental de Camagüey las palabras del Apóstol de la Independencia de Cuba, José Martí, cuando dijo: "Guáimaro libre nunca estuvo más hermosa que en los días en que iba a entrar en la gloria y en el sacrificio. Era mañana y feria de almas Guáimaro".
Justo en el mismo lugar donde se firmó hace 155 años la Primera Constitución de la República de Cuba en Armas, el pueblo patriota y batallador decidió reunirse para fortalecer aquel abrazo de unidad vigorizado con el decursar del tiempo.
Con la presencia de Juan Esteban Lazo Hernández, miembro del Buró Político del Comité Central del Partido Comunista de Cuba (PCC) y presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular y del Consejo de Estado; Federico Hernández Hernández, miembro del Comité Central del PCC y primer secretario en Camagüey, aconteció la gala homenaje inspirada en la significativa fecha.
En la ocasión, también, fueron recibidos en la localidad Homero Acosta Álvarez, secretario de la Asamblea Nacional del Poder Popular y del Consejo de Estado de la República de Cuba, y Jorge Enrique Sutil Sarabia, diputado al Parlamento y Gobernador en tierra agramontina.
A la lista de personalidades presentes en la memorable convocatoria histórica se suma el Dr. Eduardo Torres Cuevas, director de la Oficina del Programa Martiano y presidente de la Academia de Historia de Cuba.
En representación del territorio que hoy más que nunca viste sus mejores galas destacan Alexander Masague Álvarez, primer secretario del Comité Municipal del Partido Comunista de Cuba, en Guáimaro, Yelenis Saavedra Tamayo, presidenta de Gobierno en la demarcación, y Norge Alfredo Suárez Tamayo, intendente municipal.
Un elenco de lujo integrado por artistas de la comarca de pastores y sombreros, unidos a los del patio, protagonizó y honró la exquisita propuesta cultural titulada: Guáimaro gloria y sacrificio.
Una vez más, en las áreas del Complejo Monumental Museo-Mausoleo, lugar donde reposan las cenizas de la insigne patriota camagüeyana Ana Betancourt de Mora, se escuchó el vibrar inmortal de su voz cuando, cuatro días después, el 14 de abril de 1869, abogó por los derechos de la mujer ante el grupo de hombres que redactó la Carta Magna de 24 artículos.
De Carlos Manuel de Céspedes, estremeció el ímpetu, de Ignacio Agramonte, la virtud.
En esta jornada de evocación, José Rodríguez Becerra, director de la Oficina del Historiador, en las palabras centrales corroboró que la Constitución de Guáimaro continuará siendo por épocas espíritu de luz, de impulso, algo que nos envuelve y nos hace diferentes, y esa diferencia es el traje de identidad de cada guaimareño, cada cubano. (Fotos tomadas de Facebook)
