Nueva herramienta para medir la sostenibilidad desde un concepto integral, que abarca aspectos económicos, sociales y medioambientales
En fase de prueba, una nueva metodología establecida por la Organización de Naciones Unidas (ONU) permitirá medir la sostenibilidad en destinos turísticos del mundo, al enfatizar en las dimensiones económica, social y medioambiental.
Al dialogar con la Agencia Cubana de Noticias, Gustavo Santos, director regional para América de ONU Turismo, explicó que más de 100 expertos internacionales intervinieron en el diseño de esa herramienta, que proporcionará obtener datos confiables y comparables, de manera que se puede evaluar la gestión de los destinos y eso ofrecerá mayor seguridad a los visitantes.
Argumentó que la implementación de la Metodología para la Sostenibilidad Turística (MST), aprobada en el mes de marzo último por la Asamblea General y el área de Estadísticas de las Naciones Unidas, adiciona una responsabilidad para ONU Turismo, organización que prevé aplicarla de forma piloto en cinco países.
Con posterioridad, añadió, será extendida a los restantes estados miembros de la ONU, considerando que todos expresaron su consentimiento para cumplir esta compleja misión, que exige elevar los niveles de preparación para medir la sostenibilidad desde un concepto integral, que abarca aspectos económicos, sociales y medioambientales.
La MST contribuirá a incrementar la preparación de los destinos turísticos, cuyos gestores deben concebir la sostenibilidad como un camino a recorrer: “no es algo que se obtiene y logra para siempre; es una actitud de vida y proceso permanente que debe acompañar el progreso de la denominada industria del ocio”, expresó Santos.
El Director Regional para América de ONU Turismo valoró la adecuada implementación en Cuba de los criterios de sostenibilidad, constatados durante visitas técnicas a diferentes destinos.
Reconoció, además, la existencia de un proyecto que promueve el turismo sostenible, centrado en los enclaves de sol y playa Jardines del Rey y Varadero, para integrar la conservación, así como el uso sostenible de la biodiversidad y la mitigación al cambio climático en áreas marino-costero vulnerables, mediante el diseño y la instauración de modelos innovadores con capacidades y mecanismos financieros fortalecidos.