Guáimaro, 21 oct.- En el más oriental de los territorios camagüeyanos se trabaja para obtener resultados positivos en el ámbito social, político y económico, a pesar del recrudecimiento del bloqueo de las administraciones de Washington contra la isla.
La salud cubana es una de las esferas más afectadas por la hostil política imperial, pero a pesar de ello, ha mantenido los servicios a la población y busca soluciones y alternativas para resolver cada dificultad.
El impacto de la crisis en este sector presenta retos de difícil solución con un sistema de salud universal y gratuito, limitando al mercado de medicamentos, insumos y equipos médicos.
En Guáimaro se rescatan los conceptos fundacionales del programa de los médicos de la familia, pilar fundamental del sistema de salud pública en la región.
Los equipos representativos de los 31 consultorios con que cuenta la localidad brindan atención médica integral, dispensarizada y preventiva mediante los programas de Atención Primaria, Adulto mayor, Materno Infantil, Inmunización, Higiene y Epidemiología, cáncer, entre otros.
Además, con la materialización del necesario ordenamiento se analizaron los precios de los medicamentos para la venta en farmacias comunitarias, productos de medicina natural, prótesis dentales, así como las tarifas de determinados servicios y productos asociados con el calzado profiláctico, y las ópticas.