Guáimaro, 3 abr.- La producción de alimentos, el papel del municipio y la necesidad de sembrar cada vez más constituyen tareas de vital importancia para alcanzar la soberanía alimentaria, la sustentabilidad y aprovechar todo el potencial que tiene el programa de autoabastecimiento local.
En el más oriental de los territorios camagüeyanos resulta fundamental apoyar a las pequeñas granjas, parcelas y la economía local. Para ello es necesario fortalecer la instrucción ambiental.
Se debe establecer un sistema de educación basado en las buenas prácticas alimentarias, fortalecer la autonomía regional y promover la práctica de la agricultura sostenible sobre las bases agroecológicas.
A lo anterior se suma el interés de capacitar a los pobladores en saberes nutricionales y curativos, dotándolos de una cultura alimentaria. Además, se deben impartir talleres sobre la producción de alimentos desde el ámbito familiar comunitario, pues así, poco a poco, se logra la obra con el deseo de hacerla inmensa. (Foto Archivo)
