Jul, 2024.- Hoy se me antoja recordarte. En esta jornada retorna a mi mente el sentimiento amoroso —que viene a ser motivo, tribuna del ser/hombre/historiador. Este 1ro de julio evoco tu finísimo oficio, sí, el de enseñar y educar, el mismo que hiciste brillar en tus años de existencia, al punto de ubicar tu nombre en la lista de los intelectuales más sólidos en el panorama municipal, provincial y nacional.
Guáimaro, tu pueblo encantado, te sabe de memoria. Atesoraste siempre el don de hilvanar con dialéctica y conocimiento la pasión por las leyendas del terruño, que justo en esta primera jornada del mes de julio, Día del Historiador Cubano, opta por desempolvar en su libro de remembranzas los capítulos que ratifican la grandeza de tu legado, el mismo que saca siempre a la luz los inolvidables estados vivenciales dibujados con la manera auténtica de dialogar, escribir e investigar, esa que nunca te falló y supiste alimentarla con creces.
En cada plaza refulge tu espíritu redentor. Los espacios más encumbrados de la región protagonista de la firma de la Primera Constitución de la República de Cuba en Armas se nutren de tu sabia, y es que en todos dejaste tu huella, impronta necesaria, materia de referente, líneas diversas reflejos de una sabiduría expresadas por ti, en todos los momentos de tu existencia.
Para los guaimareños que te veneran tus estudios traspalados a los libros sirven de guía para enfrentar los tiempos actuales, para no dejar morir las esencias que nos definen como pueblo y nación.
Por siempre presente están en el poblado que amaste y defendiste, tu ética interpersonal y tu portentosa acumulación de saberes.
Para el final de mi escrito reservé tu nombre, Desiderio Borroto Valdés, el eterno historiador de Guáimaro.
Aquí estás y permaneces con tu blog de notas siempre abierto sobre el escritorio. Para continuar indagando acerca de hechos y acontecimientos que nos engrandecen, para seguir contándonos anécdotas, e invitarnos a redescubrir, una vez más, los momentos más ricos y diversos del devenir histórico de la localidad.
Gracias, Desiderio
por el contenido de tus textos,
por salvaguardar las costumbres y tradiciones,
por representar el ímpetu que se siente y manifiesta por el suelo patrio,
Gracias, Desiderio Borroto Valdés, por el amor.