May, 2024.- En la vida hay amores que nunca pueden olvidarse, así reza una popular melodía que más de una vez hemos tarareado, ya sea en festividades o jornadas significativas.
Confieso, mi eterno enamorado se está poniendo viejo, evocar sus años convoca a trasladarnos en el tiempo y hablo en plural porque mi prometido tiene tantas novias que no me alcanzaría la existencia para contarlas. Apacible, unas veces taciturno, más encantado, luce trajes increíbles y se presenta con el empeño de hacer suyas nuevas conquistas.
No sé si mi pretendiente es mago o sobrenatural; eso sí, se emociona cuando le ofrendan poemas y, llegada la noche, cientos de románticos optan por acompañarlo animados por el conocido refrán “Al que a buen árbol se arrima, buena sombra lo cobija”.
Un poco bardo, privilegiado por la historia, nunca pone mala cara y recibe a oriundos y foráneos presto a defender su identidad, la que exhibe con toda la dignidad del universo. Se sabe importante, se crece ante las dificultades, no teme a las canas porque estas le aportan experiencia y sabiduría y, además, despierta en muchos la expresión: ¡Oye, te ves muy interesante!
Hoy más que nunca refulgen en él lo naciente, lo perpetuo, por eso mi ternura se multiplica y no me molesto cuando le obsequian frases bonitas y galanteos, al contrario, me enorgullece porque no solo yo me apasiono con su perfume, también muchos le siguen el rastro y atónitos quedan ante su hospitalidad.
Mi eterno galán gana admiradores, los que unidos se transforman en protagonistas de una leyenda mágica capaz de ratificar el carácter visionario de un carismático enamorado comprometido con su tiempo.
No demoro más, es el momento justo para anunciarles el nombre del inspirador de esta página. Tanta es su popularidad que en la mayor de las Antillas y en gran parte del mundo puedes encontrar personas de todos los sexos y edades que le añoran y respetan. ¡Sí, Guáimaro es mi gran novio! El que abre puertas para saber andar, el pueblo que este ´2024´, en su aniversario 233 de fundación, invita a brindar por la fraternidad, la paz y el amor.
Tantos apasionados no pueden estar equivocados. El territorio escenario de la firma de la Primera constitución de la República de Cuba en Armas pervive, deja huellas y se levanta con el espíritu de defender en todas las batallas su esencia que crece en cada uno de sus hijos decididos a exclamar en todas las contiendas ¡Por orgullo somos guaimareños! (Foto tomada de Internet)
Escuche más detalles en el programa Identidad, galardonado con el primer lugar en el recién finalizado Festival Provincial de la Radio, Camagüey ´2024´.
