Guáimaro, 15 ago.- La utilización de métodos anticonceptivos por parte de los adolescentes con vida sexual activa es insuficiente, lo cual se refleja en los embarazos no deseados en Guáimaro.
La presencia de menores en las consultas de regulación menstrual y en las intervenciones realizadas en el hospital municipal es un indicador significativo de esta problemática social.
Muchos jóvenes no son conscientes de los riesgos asociados a estas prácticas y las consideran como una forma de prevenir el embarazo, cuando en realidad no lo es.
La consulta de planificación familiar de la región ofrece numerosas opciones anticonceptivas accesibles para toda la población a través de los consultorios médicos.
Es fundamental fortalecer la educación preventiva tanto en el entorno familiar como escolar, así como sensibilizar al personal de salud, para que los adolescentes comprendan los peligros reales a los que se exponen si no practican sexo protegido
