Guáimaro, 17 oct.- Las instituciones educacionales en el más oriental de los territorios camagüeyanos potencian, a través de las clases, encuentros deportivos y trabajos productivos, valores como la laboriosidad, imprescindible para el desarrollo del ser humano.
Desde edades tempranas, en la primera infancia, se desarrollan sentimientos de satisfacción por las actividades laborales que realizan, basadas en el respeto a los semejantes por medio de la solidaridad y la formación, además, de hábitos socioculturales.
La enseñanza Secundaria Básica se apoya en los círculos de interés atendidos en el Palacio de Pioneros La Edad de Oro, recinto donde se incentiva, también, la formación vocacional por las diferentes disciplinas y acciones allí materializadas.
En la educación media y técnica profesional se fomenta este valor, por ejemplo, participando en las escuelas al campo, en la exigencia para lograr convocatorias curriculares de calidad y en las prácticas pre-profesionales. (Foto La Demajagua)