Nov, 2024.- El fallecimiento este martes 12 de noviembre de 2024 del Dr. Jorge González Pérez, conocido cariñosamente como Popi, deja un vacío inmenso en la medicina cubana y en el panorama científico y humanista que tanto defendió y engrandeció.
Dolorosa pérdida para Cuba, su medicina, su peculiar escuela médica y ámbito científico. También para el humanismo que...
Publicado por Ronquillo Bello en Martes, 12 de noviembre de 2024
González Pérez es y será por siempre el médico y científico visionario cuya labor trascendió las fronteras de lo común para convertirse en un referente mundial. Con su dedicación a la profesión y su peculiar escuela médica transformó vidas y estableció novedosos paradigmas de lo que significa cuidar, sanar y enseñar.
Bajo su guía y liderazgo, el sistema de la salud en la isla alcanzó niveles extraordinarios de desarrollo al corroborar en todos los escenarios que la medicina cubana cura cuerpos, toca almas y refleja el espíritu esperanzador y de victorias que dibujó en hechos y memorables acciones.
Instrumental en la formación de generaciones de médicos que aprendieron de enfermedades y tratamientos, del valor de la compasión y el servicio desinteresado, su influencia se percibe en la salud pública, desde los hospitales en La Habana hasta las misiones internacionalistas y de colaboración en los lugares más recónditos del planeta.
González Pérez entendía que la medicina no podía avanzar sin el apoyo de la ciencia, por esa y muchas otras razones dedicó su vida a fomentar la exploración médica en Cuba. Bajo su dirección se realizaron estudios cruciales que mejoraron el tratamiento de enfermedades y abrieron nuevas fronteras en la medicina.
Su papel en la identificación y repatriación de los restos del Che Guevara,sobresale como uno de los momentos más trascendentales en su fructífera existencia, este acto, como bien se afirma, devolvió a la mayor de las Antillas un héroe y revivió la fuerza de su utopía.
La partida del Dr. Jorge González Pérez deja un pesar profundo en su familia, en sus compañeros y en la patria que dignamente representó. Su impronta continúa viva en cada vida que tocó, en los doctores que formó, y en los seres humanos que encontraron alivio gracias a su consagración y sabia.
Hoy y siempre ¡Honramos su memoria! (Foto tomada de Prensa Latina)