Guáimaro, 9 sep.- Educar frente al riesgo del consumo de drogas es un reto que concierne a todos, debido a sus efectos destructivos, que se extienden no solo a la persona que las consumen, sino también a las familias y a la sociedad en su conjunto.
Entre las afecciones que aparecen en consumidores de estas sustancias nocivas están las del sistema neurológico, cardiovascular, pulmonar, trastornos en la vida sexual, pérdida de peso y retracción de la vida social.
En intoxicaciones graves puede provocar alucinaciones visuales, acompañadas de estados de locura, altos niveles de agresividad, confusión, desorientación y pánico.
Proteger a las personas y ofrecerles las herramientas necesarias para entender los riesgos que entrañan las drogas es, además, un camino para minimizar vulnerabilidades en el más oriental de los territorios camagüeyanos. (Foto Radio Florida)