Jul, 2024.- El viernes 4 de julio de 1851, hace exactamente 173 años, Joaquín de Agüero y Agüero que había permanecido por casi un mes refugiado en El Farallón de la Sierra del Jacinto se movió hasta la hacienda San Francisco de Jucaral en la comarca de Cascorro, allí junto a un grupo numeroso de seguidores se levantó en armas contra el colonialismo español, aquel levantamiento independentista fue el colofón de un movimiento gestado en Puerto Príncipe y seguido por simpatizantes de Sibanicú, Guáimaro, Cascorro, Nuevitas y Las Tunas.
Era el primer movimiento independentista endógeno totalmente, en el lugar se leyó el Acta de Independencia y se alzó la bandera de la estrella solitaria como símbolo del grupo que arrancaba en ese momento.
Después de su refugio forzoso en El Farallón, Joaquín de Agüero protagoniza el levantamiento de San Francisco de Jucaral, acción que lo convirtió en precursor de la independencia cubana.
Ahogado en sangre como otros anteriores, hizo que José Martí, Apóstol de la Independencia de Cuba, expresara: “De cadalso en cadalso, de Estrampes en Agüero, de Plácido en Benavides, erró la voz de Heredia”.
Guáimaro y su comarca fueron anfitriones de muchas de las acciones libertarias de Joaquín de Agüero, en la villa fundó en ´1842´ la primera escuela que funcionó en el pueblo, al año siguiente en su hacienda de Monte Oscuro libertó a sus esclavos mediante escritura pública, esta trató de publicarla en el periódico de la jurisdicción El Fanal, fue, además, compadre de muchos guaimareños, bautizó a varios niños del emporio, entre ellos Gregorio Benítez Pérez (Goyo) que posteriormente tuvo una destacada participación en las Guerras de Independencia. (Foto tomada de Internet)