Guáimaro, 29 jul.- El verano en Guáimaro es una época mágica donde el calor del sol se mezcla con la calidez de su gente. Las calles se llenan de vida y color, y cada rincón del municipio se convierte en un escenario perfecto para disfrutar del período estival.
Las temperaturas alcanzan su punto máximo, a pesar del calor. La brisa que corre por las tardes trae consigo un alivio refrescante, invitando a todos a salir y disfrutar de las múltiples actividades que se ofrecen. Desde las propuestas recreativas en el hotel Guáimaro, hasta las ferias y eventos culturales que animan el poblado.
Los parques y plazas se convierten en puntos de encuentro donde las familias y amigos se reúnen para compartir risas y buenos momentos. Los niños corren y juegan, mientras los adultos gozan de una conversación amena bajo la sombra de los árboles.
La etapa vacacional en el más oriental de los territorios camagüeyanos es una oportunidad para el esparcimiento, para aprender y crecer. Las sugerencias culturales y educativas ofrecen gotas de saber que enriquecen el espíritu y la mente de quienes participan.
El verano en Guáimaro es una celebración de la vida, una época para relajarse y crear recuerdos inolvidables.
Del tema versa el siguiente reporte del periodista Evelio Hernández Ramos. (Foto tomada de Facebook)