Guáimaro, 31 ago.- Una de las áreas prioritarias del Ministerio de Salud Pública en Cuba es la relacionada con el Programa de Atención Materno Infantil (PAMI) dirigido a proteger a ese sector vulnerable de la población y reducir los índices de morbilidad.
Entre las acciones acometidas sobresalen el seguimiento adecuado a las gestantes con peso corporal de riesgo, el ingreso temprano en hogares maternos y el control de infecciones vaginales y urinarias.
Al respecto, la doctora Bárbara Morales, especialista en esta área en el territorio más oriental de Camagüey, alega que las labores antes mencionadas reducen la incidencia de estos factores en las futuras mamás ansiosas y siempre a la expectativa del feliz alumbramiento.
Judith Muñoz Sierra, directora de Salud en la región, fundamenta que en el hogar materno se materializa la práctica intersectorial y el apoyo comunitario, con la colaboración de varias entidades.
Entre las tareas pendientes para mejorar los resultados del PAMI en Guáimaro se encuentran la evaluación del riesgo preconcepcional y la atención al embarazo en la adolescencia, una tendencia que, aunque ha disminuido levemente, sigue siendo un problema debido a sus consecuencias biológicas y sociales. (Foto Adelante)