Guáimaro, 15 mar.- Fomentar el arte y desarrollarlo en cada rincón del territorio es una herramienta invaluable para educar en la apreciación de las diversas manifestaciones artísticas entre niños, jóvenes y adultos, además, crea espacios donde, guiados por los instructores, se impulsan la danza, las artes plásticas, el teatro y la música.
Los instructores de arte del municipio más oriental de la región agramontina apoyan las iniciativas de la casa de cultura Luz Palomares García. Mediante proyectos y agrupaciones diversas logran integrar a personas de todas las edades, fortaleciendo el movimiento cultural de la comunidad.
Asimismo, dedican sus esfuerzos a convertir la escuela en el principal centro cultural de la localidad. Con esa meta en mente imparten talleres de apreciación y creación en las aulas, respaldados por grupos de aficionados. Los resultados de este trabajo se reflejan en presentaciones que abarcan montajes coreográficos, coros, solistas, declamaciones, obras de teatro y conjuntos musicales, participando activamente en actos políticos y actividades culturales dentro y fuera de la región.
Los instructores de arte en Guáimaro, como artistas creadores, educadores y promotores culturales, representan una sólida garantía para el desarrollo del talento artístico. (Foto Escambray)